El análisis de orina proporciona información valiosa para la detección, diagnóstico diferencial y valoración de alteraciones nefro-urológicas, y, ocasionalmente, puede revelar elementos de enfermedades sistémicas que transcurren silentes o asintomáticas.
Normativa para la recogida de una muestra de orina para sedimento y cultivo microbiológico:
- Iniciar el proceso cuando se tenga la sensación de abundantes ganas de orinar, prefiriéndose en general la primera orina de la mañana, cuando la vejiga urinaria se encuentra llena de orina.
- Es imprescindible el lavado meticuloso de los genitales externos. Aclarar con agua abundante y secar bien con toalla o paño limpio.
- Recoger la orina en un frasco estéril y con cierre hermético.
- Despreciar el primer chorro.
- Trasladar la muestra en posición vertical y bien tapada. Si se produce demora en la entrega de la orina, es fundamental refrigerarla (no congelarla). En verano, es útil envolver el bote en una bolsa de plástico y a su vez introducir ésta en otra bolsa con un bloque de hielo, para su correcto traslado.